El rol de la mujer en las religiones Abrahamicas
Cristianismo
Pablo escribió a los creyentes de Efeso: las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor; porque el marido es cabeza de la mujer. l hombre no debería de estar tratando que su mujer se someta; es una responsabilidad de la mujer sujetarse voluntariamente.
En el hogar toda mujer debe desarrollar dos funciones: la
de esposa y la de madre. Ella puede ejercer una influencia poderosa en la vida
de su esposo y de sus hijos. La tarea de una mujer en el hogar no es solamente
física y su responsabilidad no es únicamente la de hacer tareas domésticas;
esta solo es una parte la cual bien puede incluir a todos los miembros de la
familia.
La parte más importante de las funciones de la mujer en el hogar es:
Ser de motivación permanente para su esposo y ser ejemplo para sus hijos.
La mujer cristiana debe practicar y enseñar a otras más jóvenes:
El amar a su marido y a sus hijos, el ser prudente y casta y el ser cuidadosa
de su casa (Tito 2:4). Las mujeres mayores deben enseñar a las mujeres jóvenes
y vivir vidas que glorifiquen a Dios.
Judaismo
La mujer es su opuesto diametral. Su naturaleza intrínseca
es la de la no-confrontación, introvertida, modesta. Pues mientras el hombre
enfrenta a los demonios afuera, la mujer cultiva a la pureza adentro. Ella es
el sostén del hogar, quien nutre y educa a la familia, la tutora de todo lo que
es santo en el mundo de D-os. “Toda la gloria de la hija del rey es interior”.
Pero “interior” no significa necesariamente “entre cuatro
paredes”. También la mujer tiene un papel que se extiende más allá del hogar,
también a la más foránea de las hijas y a la más pagana de las tierras. La
mujer que ha sido bendecida con la aptitud y el talento de influir sobre sus
hermanas, puede y debe, ser “saliente”, abandonando periódicamente su refugio
de santidad para alcanzar y movilizar a aquellas que han perdido contacto y
dirección en sus vidas.
La mujer es su opuesto diametral. Su naturaleza intrínseca
es la de la no-confrontación, introvertida, modesta. Pues mientras el hombre
enfrenta a los demonios afuera, la mujer cultiva a la pureza adentro. Ella es
el sostén del hogar, quien nutre y educa a la familia, la tutora de todo lo que
es santo en el mundo de D-os. “Toda la gloria de la hija del rey es interior”.
Pero “interior” no significa necesariamente “entre cuatro
paredes”. También la mujer tiene un papel que se extiende más allá del hogar,
también a la más foránea de las hijas y a la más pagana de las tierras. La
mujer que ha sido bendecida con la aptitud y el talento de influir sobre sus
hermanas, puede y debe, ser “saliente”, abandonando periódicamente su refugio
de santidad para alcanzar y movilizar a aquellas que han perdido contacto y
dirección en sus vidas.
Islam
La función fundamental de la mujer es “estar en casa con su
marido y sus hijos”, según las seguidoras del grupo yihadista Estado Islámico
(EI), que incluso consideran legítimo el casamiento de las niñas a la edad de 9
años. Así lo recoge un supuesto manifiesto sobre el papel de la mujer publicado
recientemente por presuntas simpatizantes de la brigada femenina del EI Al
Jansá, que advierten de que no es un texto oficial de la organización.